Según un reciente artículo publicado en la revista Frontiers in Human Neuroscience, la meditación mindfulness puede beneficiarnos mucho en la gestión de nuestras emociones.
Entre las muchas deficiciones del mindfulness se encuentra la proporcionada por la Universidad de Berkeley: "Mantener la conciencia momento a momento de nuestros pensamientos, sentimientos, sensaciones físicas y de nuestro entorno" y la de Harvard: "Sobre todo, la práctica del mindfulness implica aceptar lo que acceda a nuestra conciencia en cada momento".
Entre las muchas deficiciones del mindfulness se encuentra la proporcionada por la Universidad de Berkeley: "Mantener la conciencia momento a momento de nuestros pensamientos, sentimientos, sensaciones físicas y de nuestro entorno" y la de Harvard: "Sobre todo, la práctica del mindfulness implica aceptar lo que acceda a nuestra conciencia en cada momento".
El mindfulnes ha ganado mucha popularidad en los últimos años. Enraizado en el Budismo, sus defensores afirman que puede mejorar el sistema inmune, mejorar la atención y memoria e incrementar la densidad de la materia gris cerebral.
Se afirma también que aumenta la compasión, que facilita las relaciones interpersonales y que ayuda a acabar con las adicciones y a gestionar exitosamente el estrés.
Con la hipótesis de que el mindfulness ayuda a regular las emociones, el equipo de investigación quiso saber si alguien que habitualmente no es consciente de forma natural puede entrar en un estado de conciencia plena sólo con decidirlo o bien realizando un esfuerzo de concentración.
Se invitó a 68 mujeres de habla inglesa, que no habían practicado nunca antes meditación mindfulness a participar en el estudio.
Las participantes se dividieron en dos grupos, uno de ellos escuchó una grabación con una meditación guiada, mientras que el otro recibió una presentación de aprendizaje de un idioma nuevo.
Después de escuchar las grabaciones, a los dos grupos se les mostró imágenes perturbadoras (como un cadáver sangrando) mientras se registraba su actividad cerebral.
La meditación parece atenuar las emociones
Los resultados del experimento mostraron como la exposición a la sesión de meditación pareció ayudar al cerebro emocional de las participantes a recuperarse rápidamente tras ver las fotos, sugiriendo que la meditación atenuó las emociones negativas de los participantes que la escucharon.
El autor del estudio piensa que estos resultados muestran que la meditación puede mejorar la salud emocional y que cualquier persona puede conseguir estos beneficios tras su práctica.