domingo, 1 de marzo de 2015

Ya que en el post anterior hablé de la alexitimia y los personajes de las películas de los hermanos Coen, quiero exponer las relaciones de este rasgo de la personalidad con algunas enfermedades.
Durante los años 80, el psicólogo Eysenck y el epidemiólogo Grossarth-Maticek elaboran un modelo por el que explican las incidencias de diferentes cardiopatías coronarias y del cáncer en función del tipo de personalidad.
Hans_Eysenck
Hans Eysenck
Ronald Grossarth-Maticek
Ronald Grossarth-Maticek
Los estudios realizados eran longitudinales, es decir, se llevaban a cabo a lo largo de varios años con las mismas personas, de modo que diagnosticaron el tipo de personalidad en miles de sujetos y 10 años más tarde calcularon la mortalidad y sus causas en estos individuos; luego relacionaron el tipo de personalidad con el tipo de causa de muerte.
En concreto definen cinco tipos de personalidad, de los cuales uno de ellos es el tipo racional-antiemocional, que podríamos denominar alexitímico. Este tipo de personalidad se caracteriza por la tendencia a emitir reacciones racionales y antiemocionales, suprimiendo las manifestaciones afectivas y encontrando dificultad a la hora de expresar las emociones.
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Según los autores citados, este tipo de personas tienen tendencia a sufrir depresión y cáncer.
Eso sí, las diferencias eran más claras cuando los estudios se llevaban a cabo sobre personas sometidas a estrés.
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La importancia de este modelo se vería muy reducida si los autores no hubiesen propuesto una forma de prevenir las enfermedades en los tipos de personalidad más predispuestos: propusieron aplicar un tipo de terapia breve que llamaron Entrenamiento en Autonomía, cuyo objetivo principal era promover en el paciente la conducta que diera lugar resultados positivos para el individuo a largo plazo.
Aunque los estudios llevados a cabo por Eysenck y Grossarth-Maticek no han podido ser replicados por diferentes autores, Grossarth-Maticek ha continuado haciendo estudios longitudinales buscando la relación entre el tipo de personalidad, los hábitos de conducta, el estrés y el cáncer. Los resultados de sus investigaciones se recogen en un libro editado en castellano titulado: ”¿Es posible prevenir el cáncer?”
Un libro interesante y rigurosamente científico
Un libro interesante y rigurosamente científico
Sus conclusiones, aunque no son definitivas, parecen menos atrevidas y los resultados de los estudios publicados sugieren que parece existir una relación entre el tipo de personalidad y el cáncer, pero sobre todo cuando confluyen otros factores como el estrés y un tipo de vida no saludable (básicamente por fumar y falta de ejercicio).
Lo que está más que claro es que la no expresión de las emociones suele tener efectos nocivos en la salud, tras tantos estudios que reflejan la relación entre las enfermedades psicosomáticas y la represión y/o supresión de las emociones, pero eso espero que sea el tema de otro post.